Carlos Suárez Álvarez | 9 agosto 2023
Si los ayahuasqueros del mundo se unieran, podrían crear una cadena humana que fuera de Madrid a Moscú y viceversa. Este interesante dato se basa en una reciente investigación de ICEERS que revela que aproximadamente cuatro millones de personas han tomado ayahuasca alguna vez en su vida en América, Europa, Australia y Nueva Zelanda. Esta estimación puede ampliarse para incluir a las personas que participan en rituales de ayahuasca en Asia y África, aunque la práctica está menos extendida en estas regiones. Teniendo en cuenta estos datos, ¡la cadena humana cruzaría Eurasia desde Berlín hasta Pekín!
En 2019, el año anterior al COVID, más de 800.000 personas tomaron ayahuasca al menos una vez en su vida. Dado que una gran proporción de ellas la tomaron varias veces (o docenas), nuestras estimaciones sugieren que cinco millones y medio de personas tomaron ayahuasca ese año.
Brasil y Estados Unidos a la cabeza
En términos de cifras absolutas, Brasil y Estados Unidos, los dos países más poblados de los estudiados, son los líderes mundiales en consumo de ayahuasca.
Basándonos en los datos de la Encuesta Nacional sobre Consumo de Drogas, estimamos que aproximadamente un millón y medio de personas en EE UU han probado la ayahuasca (0,5% de la población). En Brasil, la Tercera Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas encontró que el 0,37% de la población (o casi 600.000 personas) han tomado ayahuasca.
Sin embargo, la frecuencia de consumo varía mucho entre ambos países. En Brasil, cuna de las iglesias ayahuasqueras, los grupos celebran sus rituales varias veces al mes. Eso significa que decenas de miles de miembros de las iglesias pueden tomar ayahuasca más de 30 veces al año. Por ello, se calcula que en Brasil se toman más de dos millones y medio de raciones al año.
Del Amazonas al mundo
También existen estadísticas oficiales sobre el consumo de ayahuasca en Colombia, España y la República Checa. También se han elaborado estimaciones para los Países Bajos (en colaboración con la asociación LIAAN), Uruguay (siguiendo las sugerencias del antropólogo Juan Scuro) y Estonia (gracias a la investigadora Helle Kaasik). Analizadas las cifras relativas, Colombia es el país donde las prácticas con ayahuasca están más normalizadas. Colombia tiene la tasa de consumo más alta, con un 0,8% de su población que ha probado la ayahuasca. En el otro extremo, España presenta la tasa más baja con un 0,2%. En el siguiente gráfico se presenta un desglose más detallado:
Predijimos las cifras globales basándonos en estas estadísticas y extrapolamos esta información a los países vecinos con antecedentes socioculturales similares. Para no inflar artificialmente los resultados, hicimos una extrapolación conservadora de los datos. Por ejemplo, en los países de la Unión Europea para los que carecíamos de cifras concretas, aplicamos una tasa del 0,2% (la de España) en lugar del 0,42% de los Países Bajos o el 0,5% de la República Checa. Las estadísticas checas ofrecían una horquilla (0,5% – 1,5%) en lugar de una cifra concreta. Para nuestro análisis, utilizamos el extremo inferior de esta horquilla. Aplicamos este mismo patrón al resto de las regiones y obtuvimos los siguientes resultados:
Así llegamos a la estimación de que 4.239.540 personas en todo el mundo tomaron ayahuasca en algún momento de su vida. Una de las características más significativas de esos aproximadamente cuatro millones de personas es que, según los resultados preliminares de otras investigaciones en curso, sólo el 10% pertenece a los pueblos indígenas que tienen la Banisteriopsis caapi (la liana de la ayahuasca) en sus contextos tradicionales. El resto (90%) ha llegado a la ayahuasca a través de la vertiginosa velocidad de la globalización. Pero, ¿quiénes son y qué tienen en común?
La demografía única de los bebedores de ayahuasca
La información recopilada representa los resultados de estudios actuales sobre personas que toman ayahuasca. La Global Survey of Ayahuasca Drinking (GSAD), una iniciativa de investigación internacional encabezada por la Universidad de Melbourne en colaboración con ICEERS, recopiló datos de 11.000 personas que habían tomado ayahuasca al menos una vez en su vida. Esta encuesta reveló que las personas suelen tomar ayahuasca por primera vez alrededor de los 30 años de media. Esto coincide con el rango de edad respaldado por las estadísticas oficiales.
Según la encuesta EDADES en España, la edad media de inicio en el consumo de ayahuasca es de 28 años, lo que coincide con la edad de inicio en el consumo de hipnosedantes y marca la edad más alta entre todas las sustancias estudiadas. En comparación, el consumo de alcohol y tabaco suele iniciarse a los 17 años, el de cannabis a los 18 y el de psicodélicos a los 21. El informe de ICEERS sobre la ayahuasca en España, coordinado por José Carlos Bouso, indicó que la edad media de las personas que participaban en ceremonias de ayahuasca era de 44 años. En Colombia, la Encuesta Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas muestra una tendencia muy similar en cuanto a la edad de inicio: cannabis a los 18 años, cocaína a los 19 y ayahuasca a los 27.
Profesionales con titulación universitaria
Los estudios disponibles indican que las personas que participan en ceremonias de ayahuasca suelen tener un alto nivel educativo. Según la GSAD, más del 60% de las personas que toman ayahuasca en todo el mundo tienen al menos un título universitario. El porcentaje es mayor en los Países Bajos, con un 76%, según un estudio de ICEERS coordinado por Maja Kohek y publicado en el Journal of Psychoactive Drugs. La GSAD descubrió que el 60% de las personas que toman ayahuasca en todo el mundo ocupan puestos directivos o trabajan en profesiones liberales.
Según la GSAD, el 94% de las personas que toman ayahuasca lo hacen de forma ritual, ya sea en el contexto de iglesias ayahuasqueras o de ceremonias chamánicas. Las sesiones de ayahuasca se realizan bajo la supervisión de uno o varios facilitadores que ayudan a guiar la experiencia y cuidan de los participantes. Estos eventos tienen lugar en países de todo el mundo. Ya no es necesario viajar al Amazonas para conocer la ayahuasca. De hecho, la mayoría de la gente toma el preparado en su propio país, según la GSAD: el 76,7% de los españoles la toma en España y el 87,6% de los neerlandeses la toma en Holanda.
Con buena salud, gracias
Las investigaciones disponibles indican que los bebedores de ayahuasca gozan de buena salud en general. El estudio de ICEERS en los Países Bajos demostró que los participantes en ceremonias de ayahuasca tienen un bienestar superior a la media y menos enfermedades crónicas y relacionadas con el estilo de vida en comparación con la población general. También son más activos físicamente y tienen una mejor dieta en general. A la pregunta de cómo había influido la ayahuasca en sus vidas, casi todos respondieron de forma positiva o muy positiva. Dos de cada tres personas informaron de una mejora general de su salud y bienestar, mejor control del dolor, más relajación, aumento de la energía, mejora de la salud gastrointestinal y mucho más.
Además, la investigación realizada en Holanda indicó que la ayahuasca ayudó a los participantes con problemas de dependencia de sustancias. Casi todos los encuestados afirmaron sentirse más felices y optimistas, con mayor autoaceptación, más tranquilos y en paz, y más sociables y empáticos. Además, el equipo de investigación no encontró pruebas de que la ayahuasca estuviera relacionada con ningún daño para la salud, una conclusión similar a la del estudio sobre la ayahuasca en España realizado por ICEERS.
Más información sobre las conclusiones en el resumen ejecutivo de «Ayahuasca, consumo mundial y mortalidad en los medios». Puedes solicitar el informe completo de 196 páginas aquí.
Más información
- Ayahuasca, consumo global y muertes difundidas en los medios
- Estado de salud de participantes en ceremonias de ayahuasca en Holanda
- Informe sobre la ayahuasca en España
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